Hoy recordamos el aniversario del nacimiento de Samuel Dashiell Hammett (27 de mayo de 1894 – 10 de enero de 1961), escritor estadounidense de novela negra.
Recuerdo perfectamente el fin de semana que descubrí a Hammett. Me puse a leer "El Halcón Maltés" y la mezcla de brutalidad y elegancia de Sam Spade impidieron que pudiera soltar el libro hasta que lo terminé. Hammett escribió media docena de novelas en un periodo relativamente corto de tiempo - El Halcón Maltés, Cosecha roja, La Maldición de los Dain, La Llave de Cristal, El Hombre Delgado, Una Mujer en la Oscuridad - un puñado de magníficos relatos cortos y a partir de 1935 apenas escribió nada más. Se jugó, fumó, bebió y regaló el dinero obtenido, luchó por las causas que consideraba justas y terminó encarcelado y perseguido por la caza de brujas de McCarthy, no sin antes participar en las dos guerras mundiales y terminar enterrado en el cementerio militar de Arlington.
Los libros de Hammett están llenos de afirmaciones categóricas: "El Menda había cambiado poco y no había mejorado nada", "'En este local sólo se vende whisky auténtico del de antes de la guerra' - traté de contar cuantas mentiras había en aquella frase. De momento había encontrado cinco y perspectivas de varias más", "Cuando un chino empieza a disparar, ya no suelta el arma hasta que vacía el cargador", "Desapareció como desaparece un puño al abrirse una mano"... Hammett, que empezó en el pulp fiction a cinco centavos la palabra, esculpió en sus novelas una radiografía certera y brutal de las tensiones sociales de los convulsos tiempos que le tocó vivir: dos guerras mundiales, luchas sindicales, el crack del 29 y la consiguente depresión, la ley seca...
En realidad ya había leído a Hammett mucho antes. Un amigo de la infancia me regaló un tebeo "Agente Secreto X-9", que me fascinó durante años por su estilizada línea y su compleja trama, a menudo maquiavélica. Se trata de una tira de comic que se publicó en los periódicos de forma intermitente en los años 30, siendo Alex Raymond el dibujante y Dashiell Hammett el guionista.
Un curiosa anécdota en torno a este comic es que Raymond estaba enormemente estresado por la carga de trabajo que suponía dibujar Flash Gordon y X-9 simultáneamente. Cuando no podía más Hammett hacía caer al protagonista en un sótano o alguien pegaba un tiro a una bombilla y durante un par de días la tira era todo en negro con algunos "bocadillos" en los que se exclamaba "¡Traidores!", "¿Donde está la luz?", "¡Ay!", y luego otro par de días casi todo en negro menos un cachín iluminado por una cerilla, hasta que los lectores empezaban a llamar mosqueados al periódico y sacaban a X-9 de nuevo a la luz...
Las historias de Hammett han inspirado de forma directa o indirecta múltiples películas. La adaptación más fiel de una de sus obras al cine es por supuesto "El Halcón Maltés" de John Huston, protagonizada por Humphrey Bogart. William Powell y Mirna Loy protagonizaron hasta seis películas basadas (más o menos) en "El Hombre Delgado". "Muerte entre las flores" de los hermanos Cohen es una versión de "La Llave de Cristal", y películas tan aparentemente dispares como "Last Man Standing" de Walter Hill, "Por un Puñado de Dólares" de Sergio Leone o "Yojimbo" de Akira Kurosawa se inspiran en "Cosecha Roja", la maquiavélica intervención del detective sin nombre en una ciudad minera profundamente corrompida enfrentando sistemáticamente a las mafias locales entre sí hasta lograr su destrucción. Hacia la mitad de "Cosecha Roja" el Agente de la Continental logra sentar a todas las partes, ya bastante enfrentadas para entonces, en una conferencia de paz en la que saca literalmente toda la mierda de todos contra todos consiguiendo que los que logran salir vivos de la reunión lo hagan dispuestos a aniquilarse definitivamente de una vez por todas...
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miércoles, 27 de mayo de 2009
Dashiell Samuel Hammett y la Novela Negra
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2 comentarios:
Siempre quise emular a Dinah Brand, de Poisonville, con sus medias rotas, sus labios a medio pintar, y esa manera que tenía de volverlos locos a todos en Cosecha Roja...
Personville, Natalia, Personville ;-) A mí el que me va de verdad es Max Thaler, el "susurro"...
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